Pasar al contenido principal

CEC-España ayuda a elegir el protector solar adecuado para protegerse de las radiaciones ultravioletas

Los consumidores deben comprobar siempre la protección contra las radiaciones ultravioletas y seguir las recomendaciones y advertencias de uso.
CEC-España ayuda a elegir el protector solar adecuado para protegerse de las radiaciones ultravioletas

Un año más, el Centro Europeo del Consumidor en España (CEC-España) recuerda a las personas consumidoras cómo elegir el protector solar adecuado y cómo protegerse frente a las radiaciones del sol. De este modo, para elegir el producto apropiado y utilizarlo correctamente es importante prestar atención al índice de protección solar, así como las recomendaciones de empleo y advertencias de uso que aparecen en el envase.

Información al consumidor

Los protectores solares son considerados productos cosméticos y como tal están regulados por la legislación europea que establece las obligaciones de información y etiquetado.

La protección contra la radiación ultravioleta se identifica en el etiquetado a través del Factor de Protección Solar (FPS o SFP en inglés), que lleva una numeración entre 6 y 50+, y descriptores como “protección baja”, “media”, “alta” o “muy alta". Las declaraciones sobre la eficacia de los productos de protección solar han de ser sencillas, no ambiguas y basarse en criterios normalizados. Además, las etiquetas, en la presentación, en la venta o en la publicidad de estos productos no se les puedan atribuir características de las que carecen.

Tipos de fotoprotectoresSPF o FPS
Bajo2-4-6
Medio8-10-12
Alto15-20-25
Muy alto30-40-50
Ultra50+

Por su parte, la Comisión Europea estableció en 2006 una serie de recomendaciones sobre la eficacia de los productos de protección solar y a las declaraciones sobre los mismos, entre las que destacan las siguientes:

  • Deben proteger frente a las radiaciones radiación ultravioleta B (UVB) y la ultravioleta A (UVA). Las cremas solares no garantizan un 100% de protección. Por ello, no deben contener mensajes en la etiqueta como “protección total” o “prevención durante todo el día”.
  • Deberían contener mensajes preventivos como “repita con frecuencia la aplicación del producto”, “no permanezca mucho tiempo al sol, aunque emplee un producto de protección solar”, “mantenga a los bebés y niños pequeños fuera de la luz solar directa”.

La Organización Mundial de la Salud ofrece también recomendaciones e información sobre la radiación ultravioleta y la exposición a los rayos solares.

La resistencia al agua es otra propiedad importante que pueden presentar los fotoprotectores y que está relacionada con su eficacia.

Water resistant: No pierde su capacidad protectora después de 40 minutos de inmersión en el agua.

Waterproof: No pierde su capacidad protectora después de 80 minutos de inmersión en el agua.

La etiqueta deberá incluir, al menos, la siguiente información:

  • Nombre y dirección de la empresa responsable de la puesta en el mercado.
  • Nº de lote.
  • Protección frente a las radiaciones.
  • Fecha de caducidad en caso de que el producto caduque antes de 30 meses.
  • Modo de empleo y precauciones si las hubiera.
  • Denominación (marca y función específica del producto).
  • Ingredientes.
  • Punto verde: Identifica que la empresa envasadora cumple con la legislación europea sobre envases y residuos de envases

Recomendaciones de uso

  • Es importante aplicar un fotoprotector con un factor 30 o superior, antes de la exposición y repetir cada dos horas y después de cada baño. Se recomienda utilizar también un protector labial. Deberán tener especial cuidado las personas que tienen poca o nula capacidad para broncearse, las de piel y ojos claros, con pecas y/o lunares, aquellas que se han quemado con el sol antes de los 18 años, las que tienen antecedentes familiares de melanoma, las embarazadas o las personas que practican deportes acuáticos y de montaña. En estos casos, deberán utilizar un factor de protección más elevado.
  • Debe tenerse especial cuidado con los niños. Los menores de 6 meses no deben ser expuestos a la luz solar directa, ni siquiera con protección.
  • Deberá evitarse la exposición al sol entre las 12 y las 16 horas, los días de alta intensidad solar y los tiempos prolongados de exposición.
  • Los días nublados en los que la sensación de calor puede ser menor, los rayos se filtran a través de las nubes, por lo que hay que protegerse también de las radiaciones.
  • El riesgo de quemaduras se incrementa con la altura. Cada 300 metros aumenta un 4% la posibilidad de eritemas (inflamación y enrojecimiento de la piel) por las radiaciones ultravioletas. La nieve (80%), la arena (25%) y el agua o la hierba (10%) reflejan las radiaciones haciendo que se sumen sus efectos al incidir directamente sobre la piel.
  • No utilizar colonias, desodorantes u otros cosméticos en la exposición al sol, producen manchas.
  • No utilizar protectores solares abiertos el año anterior. Comprobar siempre el período de utilización recomendado tras su apertura (PAO), que figura en el dibujo en forma de tarro abierto del envase.

Documentos relacionados

Ayúdanos a mejorar